¿Qué es el maní? Respuesta rápida: la semilla de los
cacahuetes, unas legumbres de lo más curioso. Arachis hypogaea, la
especie a la que corresponden los cacahuetes, pertenece a la familia de las
leguminosas (Fabaceae), la misma que agrupa a las judías verdes, los guisantes,
las habas o las falsas acacias cultivadas en los jardines y en las calles de
todo el mundo.
La cáscara, es decir la legumbre, se desarrolla a partir del
ovario de una flor (lo que quiere decir que es un fruto) y contiene las
semillas comestibles en su interior rodeadas por una capa delgada de color marrón
rojizo. Así que los cacahuetes con cáscara son frutos, los abrimos y nos
comemos las semillas.
Los acontecimientos que hacen de un cacahuete un fruto
extraño suceden después de la polinización, cuando los pétalos de las flores se
caen y el ovario (que pronto será una legumbre con cáscara) comienza a introducirse
bajo tierra. No es el tallo de la flor (pedicelo) lo que entierra la fruta; más
bien, la base del ovario se alarga en una estructura llamada "clavo".
Vista cenital de una semilla de maní, ligeramente entreabierta. El mechón del centro es un conjunto de hojas nuevas que emergerán cuando la plántula germine. |
Entre los cotiledones hay una pequeña estructura que parece un pálido penacho plumoso. Ese pequeño mechón es el primer conjunto de hojas que aparecerá por encima del suelo cuando se planta un maní fresco.
Pero, por supuesto, los cacahuetes se plantan ellos mismos,
como dije antes. Cuando un cacahuete en flor empuja sus frutos hacia el suelo,
los frutos permanecen sujetos a la planta y las semillas no llegan muy lejos. Abarrotados
de docenas y docenas de semillas, los frutos se sitúan justo debajo de la
planta madre esperando a que muera. Es un buen sitio para reposar, ya que esas
semillas endogámicas son genéticamente similares a sus padres y prosperarán bien
donde lo hicieron sus progenitores en el caso de que el granjero no los
cosechara.
Por el contrario, la mayoría de las especies de plantas invierten energía y astucia para dispersar sus frutos y semillas en la medida de lo posible. Estallan para ser disparadas lejos de su planta madre, se pegan a los animales, navegan por el aire o por el agua, o viajan a través de un intestino. El extraño hábito reproductivo de los cacahuetes se llama "geocarpia activa". Esta estrategia es poco común en las plantas, pero parece estar asociada con suelos inestables, a menudo en altitudes elevadas, que sufren procesos de congelación-descongelación o ciclos extremos húmedos-secos. Quizás la autoplantación activa protege a las semillas de ser enterradas demasiado profundamente o de ser desenterradas cuando el suelo cambia.
Una
investigación genética ha situado el origen más probable del cacahuete cultivado
a una región muy pequeña en el sur de Bolivia, cerca de donde confluyen las
fronteras de este país, Paraguay y Argentina. El cultivo del cacahuete en esa
región comenzó muy temprano, prácticamente tan pronto como los humanos llegaron
allí, y parece haberse extendido rápidamente. Esa investigación sugiere que los
cacahuetes cultivados surgieron como un híbrido entre otras dos especies de
cacahuetes hace más de 9.000 años, y hay pruebas del cultivo de cacahuetes en
Perú hace unos 7800 años. © Manuel Peinado Lorca. @mpeinadolorca.