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miércoles, 9 de octubre de 2024

¿ES BUENO ZAMPARSE LA PIEL DEL KIWI?

 


Lee este artículo antes de sacar la maquinilla y la espuma de afeitar. No juzgues una fruta por su cubierta peluda. La piel única del kiwi puede no ser del gusto de todos, pero sus pelos gruesos, muy beneficiosos para la planta, pueden serlo también para tu salud.

Aunque se comercializan otras especies, el kiwi con mayor presencia en el mercado es Actinidia deliciosa, una planta nativa de China, sobre todo de los bosques del valle del río Yangtsé. Introducida en Nueva Zelanda en 1904, fue cultivada desde entonces en muchas regiones templadas del mundo. En los mercados europeos apareció bien entrada la segunda mitad del siglo pasado.

Aspectos botánicos

Actinidia deliciosa es una planta trepadora semileñosa caducifolia que puede alcanzar varios metros de longitud. Las hojas, de unos 7,5 a 12,5 cm de largo, son alternas, tienen una forma oval o casi circular con la base acorazonada de la que surge un largo peciolo. Las hojas jóvenes están cubiertas de pelitos rojizos, mientras que las adultas carecen de ellos y tienen el haz de color verde oscuro y el envés blanquecino con prominentes nerviaciones más claras.

Los kiwis tienen sexos separados con grandes flores que nacen solitarias o en grupos de tres en las axilas de las hojas. Tienen cinco o seis pétalos de color blanco al abrirse, que va volviéndose amarillo a medida que la flor envejece. Los estambres son muy numerosos en las flores de ambos sexos, aunque los de las femeninas son funcionalmente estériles pues carecen de polen viable.

Actinidia deliciosa. 

Ninguno de los tipos de flores contiene néctar, pero atraídas por su penetrante fragancia las abejas acuden a ellas para llevarse el nutritivo polen. Si vas a plantar kiwis con el propósito de conseguir frutos, no olvides que al ser plantas dioicas (flores masculinas y femeninas en diferentes plantas) las de los dos sexos se deben plantar muy próximas para que se produzca la polinización. Si te quieres dedicar a la producción comercial, deberías distribuir colmenas por la plantación para facilitar la tarea de las hacendosas abejas.

El fruto es una baya oval de aspecto inconfundible porque su delgada piel de color verde parduzco está densamente cubierta de unos pelillos rígidos y cortos de color marrón. La pulpa, dura hasta que madura completamente y se vuelve jugosa, es de color verde brillante y con diminutas semillas negras dispuestas en torno a un corazón blanquecino. Tiene un sabor que va desde subácido a bastante ácido, similar al de la grosella o la fresa. 

Para comercializar los frutos se cultivan otras especies. El kiwi dorado (Actinidia chinensis) tiene menos pelos y una pulpa más amarilla y dulce que A. deliciosa y se cultiva comercialmente en muchos lugares. Otros kiwis que no han aparecido (de momento, que yo sepa) en las fruterías occidentales incluyen dos especies resistentes al frío (A. arguta y A. kolomikta), la grosella china (A. coriacea), el kiwi rojo (A. melanandra), el kiwi plateado (A. polygama) y el kiwi morado (A. purpurea).

¿Se puede comer la piel de los kiwis?

Las exuberantes cerdas del kiwi funcionan como un mecanismo de defensa para evitar que los insectos puedan posarse sobre la superficie irregular de la fruta. También ayudan a retener la humedad y a proteger la fruta de la luz solar en el clima tropical nativo de la planta, China y Taiwán.

Aunque parece claro que estos pelos suponen una ventaja evolutiva para la planta, ¿se gana algo ingiriendo la piel desprovista de todos esos pelos? La respuesta corta es sí, ¡cómete la piel! La piel del kiwi es más rica en nutrientes que la propia fruta. Comer la piel junto con la fruta aumenta su contenido de fibra en un 50%, el de folatos (importantes en la formación de los glóbulos rojos y necesarios para la fertilidad tanto de hombres como de mujeres) en un 32% y el de vitamina E en un 34%. De hecho, hay más antioxidantes, concretamente vitaminas C y E, en la piel que en la pulpa.



Sin embargo, consumir la piel de cualquier fruta o verdura conlleva el riesgo de contaminación por pesticidas. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) elaboran una lista en la que se analizan las muestras de productos para el consumo.

La edición de 2023 de su lista clasifica a los kiwis en la categoría "clean 15", lo que significa que forman parte del grupo con los niveles más bajos de contaminación por pesticidas. Pero para reducir aún más el riesgo de que los productos tengan pesticidas, asegúrate de lavar bien las frutas y verduras y, siempre que sea posible, elige productos orgánicos.

A pesar de los claros beneficios de comer la piel del kiwi, es posible que no supere los inconvenientes de su textura rugosa. Debido a que los cristales de oxalato de calcio de los pelos causan rasguños microscópicos dentro de la boca, la piel puede actuar como un irritante cuando el ácido de la fruta entra en contacto con esos cortes.

La presencia de niveles más altos de oxalatos en la piel también puede convertirla en un riesgo para personas con antecedentes de cálculos renales, ya que los oxalatos se unen al calcio en el cuerpo, lo que podría agravar la afección.

Las alergias al kiwi también son bastante comunes y de los 13 alérgenos diferentes identificados en él, cinco se consideran importantes. Las personas con alergia al polen de abedul o al látex pueden presentar alergias orales, ya que las proteínas del kiwi tienen una estructura similar, que puede provocar una irritación leve o grave en la boca y, en algunos casos, anafilaxia.

Sin embargo, si no tienes antecedentes de cálculos renales o alergia al kiwi, y si eres un poco masoquista, quizás no deberías pelar tus kiwis.