Sabemos que en 2021 había censadas 58 497 especies de árboles en todo el mundo. Gracias al informe State of the World`s Trees sabemos también que sobre un 30% de ellas (17 510) pesaba algún tipo de amenaza que las hacía merecedoras de su inclusión en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN).
Las principales amenazas identificadas para las especies de árboles
evaluadas en la Lista Roja de la UICN se muestran en la siguiente Figura, y pueden
ser clasificadas en cuatro grandes grupos: Pérdida de hábitats, Explotación,
Plagas y Cambio climático.
Principales amenazas para las 17 510 especies arbóreas incluidas en la Lista Roja de la UICN |
Pérdida de hábitats
La pérdida de hábitats es actualmente la mayor amenaza para las
especies arbóreas. La pérdida no solo incluye la eliminación total de la
vegetación, sino también la degradación y fragmentación persistente de los
hábitats. La fragmentación provocada por causas naturales como tormentas e
incendios, y más sistemáticamente por el cambio antropogénico del uso de la
tierra, es un factor
significativo que reduce la diversidad vegetal.
Durante los últimos trescientos años, la superficie forestal mundial se
ha reducido en un 40 % aproximadamente y 29 países han
perdido más del 90% de su cubierta forestal. El cambio de uso de terrenos
para la agricultura amenaza a más especies arbóreas que cualquier otra amenaza
conocida. Puede tener lugar a muchas escalas diferentes: desde la agricultura
de tala y quema a pequeña escala, pasando por la transformación a mediana
escala para cultivos comerciales (como el café y el té), hasta cultivos
comerciales a gran escala (como la palma de aceite, la soja, el cacao o el
caucho).
Hay siete cultivos principales que impulsan más de la mitad de la
deforestación en todo el mundo. Solo las regiones no aptas para pastos y cultivos
agrícolas (desiertos, bosques boreales y tundra) se han visto menos afectadas
por el cambio de uso de las tierras. Otras causas de la pérdida de hábitat
incluyen la conversión y degradación de la tierra por el desarrollo urbano e
industrial (incluidas las infraestructuras de transporte), la minería y los
cambios en los regímenes de incendios.
Ovejas pastoreando en los encinares adehesados de Cabañeros. Foto de Luis Monje |
Explotación forestal
La segunda gran amenaza para los árboles es la explotación directa,
especialmente de madera, que afecta a más de 7 400 especies arbóreas. La
extracción de maderas tropicales valiosas para el comercio internacional se ha
llevado a cabo durante siglos. Los bosques de la región del Caribe fueron
explotados para uso maderero europeo desde la época de Colón, con la caoba, Swietenia
mahagoni, a la cabeza de las más apreciadas
La explotación de la madera de África occidental para el mercado
europeo se remonta al menos a 1672, cuando la Royal African Company obtuvo
una patente del rey Carlos II de Inglaterra para comerciar con caoba africana (varias
especies de Khaya y Entandrophragma). A finales del siglo XX, una
evaluación del alcance de
la tala en los trópicos calculó que el 20% de los bosques tropicales se talaron
o se concedieron a empresas madereras entre 2000 y 2005. Alrededor de la mitad
de esa superficie ya había perdido más del 50% de su cobertura forestal
potencial.
El aumento del nivel de vida de China ha conducido a una explotación
intensiva de las maderas de dipterocarpáceas indomalayas utilizadas para
fabricar muebles hongmu
que tradicionalmente solo adquirían la realeza y las élites. Las especies
malgaches de los géneros Diospyros y Dalbergia han sido explotadas
implacablemente para abastecer el mercado chino, como también ha sucedido con
las especies de Dalbergia de Centroamérica. El palisandro (Dalbergia)
representó el 35% del valor de todas
las incautaciones relacionadas con la vida silvestre y los productos
forestales a nivel mundial entre 2005 y 2014. Al menos 76 especies de Dalbergia
y al menos otras 164 de Diospyros están amenazadas.
La extracción de madera de los hábitats naturales se aplica
particularmente a las maderas duras tropicales, de las cuales se extraen
anualmente aproximadamente 300 millones de metros cúbicos de madera, lo que
equivale a la
tala de unos 100 millones de árboles. La explotación de árboles madereros a
matarrasa, cuando se cortan áreas enteras de bosque, o la tala selectiva, donde
se talan determinadas especies codiciadas, continúa bajo varias formas de
manejo forestal.
La tala, el transporte, la compra o la venta ilegal de madera es un
problema global que no cesa. La cuantificación de la tala ilegal es complicada
por su propia naturaleza, pero la INTERPOL estima el importe anual de los delitos
forestales entre 51 000 y 152 000 millones de dólares americanos. Además de
la tala, los árboles también pueden ser objeto de explotación más allá del
comercio maderero. Casi el 2% de los árboles están en riesgo por otras formas
de uso, ya sea con fines medicinales, hortícolas u otros.
Corteza de castaño infestado con los ascocarpos (en marillo) del chancro del castaño |
Plagas y enfermedades
Los árboles de todas las especies se ven afectados por una amplia gama
de plagas y enfermedades que se propagan por causas naturales y artificiales. Las
especies invasoras se consideran como amenazas para 1.356 especies registradas
en la Lista Roja de la UICN. Un caso paradigmático es la muerte
de más de 4 000 millones de castaños americanos (Castanea dentata) que
sucumbieron por el ataque del chancro, un hongo importado de China, (Cryphonectria
parasitica) que ahora amenaza a los castaños (Castanea sativa) en
toda Europa.
Una temible plaga invasora en América del Norte que ha llegado a Rusia
y avanza por Europa oriental es el barrenador esmeralda del fresno (Agrilus
planipennis), un escarabajo barrenador de la madera nativo del este de Asia,
que se introdujo accidentalmente a través
de palés infestados. Esta plaga está causando
grandes problemas de mortandad durante las últimas dos décadas que han traído
como resultado que seis especies de fresnos norteamericanos hayan ingresado en
el listado de la UICN como especies en Peligro Crítico
Otra amenaza para las especies de fresnos en toda Europa (incluidas las
españolas Fraxinus excelsior y F. angustifolia) es la enfermedad “muerte
regresiva del fresno” causada por el hongo patógeno invasivo Hymenoscyphus
fraxineus que bloquea los sistemas de transporte de agua en los
árboles, provocando lesiones y el decaimiento de la copa, hasta causar la muerte
del árbol. La enfermedad se detectó por primera vez en Polonia y Lituania en la
década de 1990 y posteriormente se propagó a
la mayoría de los países europeos.
La Red
Internacional de Centinelas de Plantas facilita la colaboración entre
institutos de todo el mundo, para trabajar conjuntamente con el objetivo de
proporcionar un sistema de alerta temprana de riesgos de plagas y patógenos
nuevos y emergentes.
Cambio climático
El cambio climático está impactando en todos los ecosistemas forestales
y cada vez más resulta en una amenaza significativa para los árboles. En las
evaluaciones de especies arbóreas de la Lista Roja de la UICN, el cambio
climático y los climas extremos se registran como una amenaza en 1 080 casos.
Los árboles de los ecosistemas costeros, boreales y montanos se ven afectados por
el cambio climático de manera desproporcionada en comparación con otros
hábitats. Los cambios y alteraciones del hábitat son las consecuencias más
comunes del cambio climático, pero también se registra un aumento de tormentas
e inundaciones (incluidos huracanes y ciclones), que afectan especialmente a
los árboles de las islas tropicales.
Más del 20% de las especies de árboles que se encuentran en los
ecosistemas boreales también están amenazadas por los cambios de hábitat,
probablemente provocados por la invasión de la vegetación templada a medida que
las regiones boreales se vuelven más cálidas. Las especies de árboles que se
encuentran en las zonas intermareales se ven particularmente afectadas por los
cambios de hábitat, probablemente debido al aumento del nivel del mar. Estos ecosistemas
costeros también están amenazados por tormentas e inundaciones más que
cualquier otro hábitat.
Sin embargo, como también está afectando el régimen de incendios de muchos hábitats, así como a los impactos de plagas y enfermedades emergentes, es probable que el verdadero efecto del cambio climático tenga efectos más generalizados que irán manifestándose con el tiempo. © Manuel Peinado Lorca. @mpeinadolorca.