jueves, 1 de junio de 2023

Edadismo y jardines botánicos

 


Las personas mayores cada vez se encuentran más aisladas en nuestras ciudades, lo que genera problemas de inseguridad, soledad y depresión. Por eso, la organización de grupos que comparten aficiones comunes favorece que se establezcan lazos entre personas que ayudan a combatir estos problemas.

En su último número correspondiente a 2023, la revista Roots, órgano de expresión de la asociación que integra a los principales jardines botánicos del mundo, la Botanic Gardens Conservation International (BGCI), ha destacado el programa de integración para mayores desarrollado en el Real Jardín Botánico de la Universidad de Alcalá gracias a un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Alcalá de Henares.

En el Informe Mundial de la Organización Mundial de la Salud el término “edadismo” se define como «los estereotipos, los prejuicios y la discriminación dirigidos contra otras personas o autoinfligidos por razones de edad». En el caso de los mayores, en el mismo informe se destaca cómo «el edadismo contribuye a producir el aislamiento social y la soledad que se dan de forma generalizada en las personas mayores. Y el aislamiento social y el edadismo tienen graves repercusiones en la salud y la longevidad».

¿Qué puede ofrecer un jardín botánico para combatir el edadismo hacia las personas mayores?

Entre otras actuaciones, un jardín botánico puede luchar contra el edadismo dirigido a los mayores mediante la creación de grupos de personas mayores que comparten una afición común, la oferta de pasar un día en contacto con la naturaleza y la ayuda para interpretar y entender lo que están viendo

Un jardín botánico puede establecer relaciones con muchas instituciones que están en contacto con la tercera edad, desde centros hospitalarios a asociaciones de distintos tipos. Los jardines botánicos pueden actuar como lazos de unión para organizar grupos que de otra forma no se formarían.

El desarrollo de actividades con estos grupos en un jardín botánico no solo crea lazos entre los miembros del grupo, sino también entre estos y el personal del jardín. Después de pasar un día placentero en el jardín botánico es probable que una persona repita la experiencia, estrechando aún más los lazos creados. Pero, además, el contacto con otros miembros del grupo puede hacer que deseen participar juntos en otras experiencias fuera del jardín.



El programa del Real Jardín Botánico y el Ayuntamiento de Alcalá de Henares

Crear grupos de personas mayores aporta beneficios a este colectivo y al propio jardín Botánico. Por eso, gracias a un convenio suscrito en mayo de 2022 entre la Universidad y el Ayuntamiento, el Real Jardín Botánico ha desarrollado por primera vez un programa en colaboración con la concejalía de Mayores del Ayuntamiento de Alcalá de Henares.

Gracias al programa se han desarrollado dos tipos de actividades: una para grupos pequeños de personas con movilidad reducida y otra para grupos más numerosos de personas que pueden pasear sin problemas.



Para grupos reducidos se ha ofrecido una visita guiada recorriendo el jardín en buggies. Para hacerla se dispone de tres vehículos; el primero lo conduce un educador del Jardín que, con un altavoz, va explicando el recorrido. Este vehículo es seguido por otros dos, conducidos por alguno de los visitantes del grupo. ¡Siempre hay varias personas mayores que quieren conducir! Estos grupos son de 11 mayores más el educador.

Para grupos grandes, de hasta cincuenta visitantes, se ofrecen visitas guiadas con especial hincapié en la visita a la colección de cactus. Al terminar la visita, se les obsequia con un ejemplar de cactus. En estas visitas el recorrido se realiza andando.

Las conclusiones que se han podido obtener hasta la fecha son varias: permitir que los participantes intervengan de forma activa conduciendo los vehículos aumenta la autoestima y el disfrute de la visita;  obsequiarles con un pequeño detalle es poco costoso para el Jardín y enriquece el valor de la actividad;. y el hecho de contar con la ayuda de otras instituciones que organizan de forma regular actividades para este colectivo ha sido un acierto.


Por último, hay que destacar que todos los participantes coinciden en que no es lo mismo visitar el Jardín de forma particular y aislada que visitarlo en grupo, ni visitarlo con educadores del Jardín o sin ellos.

Texto redactado a partir del original de Blanca Olivé de la Puente publicado en la revista Roots.