¿Mascarilla sí o
mascarilla no? Depende. Si usted está contagiado o sospecha que lo está,
utilícela siempre que comparta un espacio cerrado o esté cerca de otras
personas tanto en su hogar como en los comercios o en su centro de trabajo. En
el exterior no es necesaria, salvo si quiere mostrar respeto por las personas
que la usan. En cualquier caso, nunca sobra y es imprescindible en determinados
lugares públicos.
Investigadores de varias
instituciones científicas finlandesas han
utilizado un modelo generado por ordenador para simular la propagación de las
pequeñas partículas virales que todos nosotros expulsamos cuando estornudamos. El
modelo muestra cómo se propagan esas partículas en el aire en los pasillos de
los supermercados
Recordemos que cuando una
persona tose, emite dos tipos de partículas. La principal vía de transmisión
directa de los coronavirus se produce a través de gotitas diminutas pero
visibles expelidas al hablar, toser o estornudar. Como estas partículas son más
pesadas, no permanecen en el aire y se depositan inmediatamente en las
superficies o en el suelo, a partir de donde, de forma indirecta, el virus
puede transmitirse a través de las manos o
de objetos recientemente contaminados.
Los investigadores modelaron una situación en la que una persona tose por un corredor estrecho formados por los típicos estantes de los supermercados. Imagen: Petteri Peltonen / Universidad Aalto. |
La transmisión de virus entre
humanos también puede producirse a través de aerosoles, unas partículas de pequeño tamaño casi invisibles que,
como son más ligeras, pueden permanecer más tiempo en el aire. En ambientes
abiertos y bien ventilados, como las corrientes de aire por pequeñas que sean las
dispersan, no representan ningún peligro de contagio.
Pero según sugieren los
resultados la nueva investigación este mecanismo de transmisión puede ser
relevante en ambientes con una inadecuada ventilación como los que pueden
presentarse en los pasillos angostos de algunos comercios.
Los investigadores
simularon un escenario en el que una persona tose en el pasillo entre los
estantes de un supermercado. Luego, el ordenador fue calculando lo que sucedía
bajo diferentes condiciones de ventilación. Cuando la ventilación es escasa, descubrieron
que una "nube" de aerosoles se dispersa formando un halo ligeramente
alejado de las proximidades de la persona que tose que va diluyéndose a medida
que se extiende. Pero, aunque se disperse, ese proceso dura varios minutos y,
mientras tanto, una persona que camine sin mascarilla entre los estantes podría,
en teoría, inhalar las partículas pequeñas.
Es un modelo muy
importante y tiene mucho sentido. ¡Cuando entras en el pasillo de una tienda puede
que haya un enemigo completamente invisible! ¡Protégete y protege a los demás!
Recomendaciones dentro
del supermercado
Antes de entrar en
detalles, es importante tener en cuenta que actualmente no hay evidencia de que
la nueva enfermedad, COVID-19, se transmita a través de la ingestión de alimentos.
Hasta donde sabemos, la enfermedad parece propagarse principalmente de persona
a persona a través de partículas de virus que se transmiten cuando alguien tose
o estornuda.
Los objetos contaminados por
el estornudo de otros pueden transmitir el virus si alguien toca ese objeto, remueve
las partículas de virus de la superficie (en la que puede ser viable durante
unas horas) y luego se toca la boca, la nariz o los ojos.
Para prevenir esos modos
de transmisión, muchos comercios están tomando precauciones
especiales de seguridad higiénico-sanitaria, como limitar el número de
personas permitidas en el local al mismo tiempo, desinfectar los carros y las
superficies que se tocan con frecuencia, colocar cintas o marcas en el suelo
para ayudar al distanciamiento social y modular los horarios.
Pero todavía hay cosas
que los clientes podemos hacer para reducir la propagación del coronavirus y el
riesgo de contagiarse en el local comercial. Dejo una pequeña guía de recomendaciones
para hacer la compra durante la pandemia.
Antes de ir a comprar
Piense si realmente
necesita ir de compras. Lo más adecuado es ir lo menos posible. Si solo necesita
algunos artículos, intente aguantar con los que tiene y planifique una salida para
comprar más cosas. El consejo es que compremos suficientes alimentos para una o
dos semanas.
El reparto a domicilio puede
ser una opción, pero no es accesible a todo el mundo y, cuando lo es, la alta demanda
dificulta la gestión, por lo que hay que planificar con la antelación
suficiente. Entregar los comestibles ayuda a reducir la cantidad de personas
que entran en las tiendas y tocan los artículos, y ayuda a las personas a
seguir las normas de aislamiento social. También ayuda a reducir la propagación
del virus de personas infectadas que no muestran síntomas. Cuando se empiecen a
hacer tests masivos, descubriremos que son legión.
Intente comprar fuera de
las horas pico y compre tantos artículos como pueda en una sola tienda.
Haga la compra solo. Esto
ayuda a reducir la cantidad de personas que van a las tiendas.
No vaya si tiene
síntomas: es muy importante no ir de compras si presenta síntomas de COVID-19
(como fiebre, tos o falta de aire), o si cree que ha estado expuesto al virus.
En estos casos, debe dejar su casa solo para ir al médico. Si necesita algunos
artículos sean alimentos o no, pídale a un amigo o a otra persona que los compre
y se los deje ante la puerta cerrada.
En la tienda
Desinfecte sus manos con
frecuencia: usa el desinfectante para manos que los comercios han colocado en
lugares accesibles antes de entrar a la tienda y después de salir.
Si el comercio no
proporciona toallitas desinfectantes, lleve sus propias toallitas para usar en
carros, canastos rodados y lectores de tarjetas.
Use una mascarilla. Esta
recomendación está destinada a prevenir la propagación de COVID-19 de personas que
ignoran que están infectadas por ser asintomáticas.
Cumpla con el
distanciamiento social: como en cualquier otro lugar público, debe mantener una
distancia de al menos metro y medio con los demás.
Toque solo lo que compra:
trate de no tocar cosas si no va a comprarlas. Eso significa que no manosee muchos
productos intentando encontrar el más maduro, por ejemplo.
Los guantes no son
necesarios: salvo para los productos frescos como norma de higiene general, utilizar
guantes en la tienda no es necesario porque los guantes se contaminan de la
misma manera que sus manos. Lavarse o desinfectarse las manos antes de entrar y
después de salir a la tienda es lo importante. Pero si prefiere usar guantes,
use unos desechables y tírelos a la basura antes de subir a su coche, tan
pronto como llegue a su casa si ha ido a pie o en transporte público.
No se toque la cara:
evite tocarse los ojos, la nariz y la boca con los guantes usados o con las
manos sin lavar.
Fuente |
Cuando llegue a casa
Lávese las manos: debe
lavarse las manos o usar desinfectante para manos después de manipular los
envases.
No deje su comida fuera
de su casa: aunque en las redes sociales se ha sugerido dejar los alimentos en el
garaje o en el trastero durante tres días para matar el virus, es un mal
consejo. No solo no está científicamente comprobado, también es un problema de
seguridad alimentaria. Dejar comida afuera, en el garaje, el coche o el
trastero, puede significar que la comida no se almacene a la temperatura
adecuada para evitar el crecimiento bacteriano; y también puede aumentar el
riesgo de plagas de roedores e insectos.
Enjuague sus productos:
siempre es una buena idea, incluso cuando no hay pandemia, enjuagar frutas y
verduras frescas con agua para eliminar la suciedad, los desechos y los
pesticidas, y reducir los niveles de gérmenes transmitidos por los alimentos
frescos.
No use jabón: no es
necesario usar jabón o desinfectantes químicos en esos productos. El gel lavaplatos
no
debe usarse para lavar alimentos, ingerirlo podría provocar náuseas y
malestar estomacal.
Lave las bolsas
reutilizables: si usa bolsas de supermercado reutilizables, debe lavarlas
después de volver de la tienda, ya sea metiéndolas en la lavadora o con jabón u
otros desinfectantes para bolsas de plástico. Si no las va a utilizar durante
algún tiempo, no hay que lavarlas, déjelas en alguna habitación donde no entre
o en una terraza tendedero, por ejemplo. Pasadas dos o tres días el virus habrá
perdido su capacidad infecciosa.
Recuerde siempre que el virus no es una pulga: no
salta. Hay que tocar los objetos contaminados con las manos y luego llevarlas la
boca, la nariz o los ojos, para que pueda contagiar. © Manuel Peinado Lorca. @mpeinadolorca.