Viajando por la estatal 421 en dirección oeste desde Winston-Salem, Carolina del Norte, hacia el Cherokee National Forest, me detengo a poner gasolina en Yadkinville, uno de esos pueblos que son apenas más que una calle-carretera que tanto abundan en Estados Unidos. Cerca de la gasolinera, una placa histórica recuerda a Thomas Clingman (1812-1897), senador y general confederado, nacido muy cerca de allí, en Huntsville, donde debiera haberse erigido con mayor precisión topográfica el hito, si no fuera por el pequeño detalle de que por Huntsville no pasa nadie que no viva allí, en mitad del olvido. La placa, sobra decirlo, no dice nada del lado oscuro de Clingman, cuyo equivocado empecinamiento provocó la muerte de uno de los primeros geólogos humboldtianos de Estados Unidos, Elisha Mitchell (1793-1857).